Es inevitable que tu perro quiera comunicarse contigo o con otras mascotas mediante el ladrido. Los canes son animales muy sociables y un perro que ladra es lo más normal del mundo, sin embargo, como en todas las cosas, existen límites.
Puede tratarse de una condición hereditaria (hay razas de perro excesivamente ladradoras por naturaleza), podría ser consecuencia de una conducta aprendida o quizás hay un trastorno de conducta que empuja a tu perro a ladrar en exceso durante el día o la noche.
Si las vocalizaciones de tu perro se están convirtiendo en un problema serio de convivencia, es hora de reflexionar acerca de esta situación e implementar algunos cambios que contribuyan a tu tranquilidad y la de tu mascota.
Se trata simplemente de un sistema de comunicación. Preguntarse por qué un perro ladra, es equivalente a cuestionarse la razón por la cual hablamos los humanos.
Partamos del hecho de que el perro que ladra, lo hace para comunicarse y las razones por las cuales tu mascota decide expresarse de ese modo, son realmente diversas. Podría hacerlo por entusiasmo, euforia, para advertirte de una irregularidad, para ponerte alerta o porque otros estímulos ambientales conllevan a esta reacción.
Como dijimos anteriormente, que tu perro ladre o no, no es el problema. El problema aparece cuando las vocalizaciones de tu perro son excesivas, ocasionando con eso una sensible perturbación en la tranquilidad del hogar e incomodando a tus vecinos.
Veamos cuáles son las causas por las cuales ladra un perro y con ellas pensemos en las posibles razones por las cuales tu mascota pierde el control.
Muchos perros ladran por el mero entusiasmo que les producen ciertas situaciones, como jugar, recibir un premio, dar la bienvenida a su amo, o mostrarse eufórico ante un estímulo placentero.
Podríamos decir que en estos casos, las causas del ladrido en perros es perfectamente normal, como lo es una vocalización de advertencia ante un intruso en defensa de su territorio, un ladrido oportuno para imponer sus normas ante otras mascotas o personas, o incluso recurrir al ladrido como una forma de alertar a sus amos acerca de una situación irregular o de peligro.
Ahora bien, los problemas con un perro que ladra mucho comienzan cuando sus amos, involuntariamente, comienzan a promover esta conducta. Muchas personas, en su afán por interactuar con sus adorados animales de compañía, promueven el ladrido como una forma de retribuir la vocalización con golosinas, premios, caricias o palabras cariñosas.
Si un padre de mascota abusa de estos estímulos, no tardará en tener en casa a una mascota que no parará de ladrar cada vez que desee un poco de atención. Cuando no puedas pasar tiempo de calidad con tu peludo, sus ladridos en busca de tu afecto podrían salirse de control y con ello, convertirse en un problema.
Añade a las causas normales del ladrido la raza de tu mascota. Los beagles, huskies, chihuahuas y otros perros chicos o de castas cazadoras, suelen ser bastante ruidosos.
En el caso de los beagles, por ejemplo, que eran usados como animales para la caza en manada, las vocalizaciones son cruciales para comunicarse con el resto de sus compañeros. Algo similar ocurre con los huskies, una de las razas más “conversadoras” que existe.
Si adoptas alguna de estas razas, debes tener presente que será una mascota que recurrirá al ladrido con muchísima frecuencia y deberás tenerlo muy presente durante la educación de tu cachorro.
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Obviamente cuando tu mascota ladra descontroladamente. En esos casos no podemos atribuirle sus vocalizaciones a las causas normales de su expresión y podrían ser el reflejo de conductas asociadas a la ansiedad, el territorialismo o un animal que no fue educado para socializar.
El ladrido excesivo puede manifestarse en animales que pasan mucho tiempo a solas, están sometidos a situaciones que le producen estrés, ansiedad o sienten miedo.
La ansiedad por separación, por ejemplo, ocurre especialmente en los cachorros o en las mascotas que pasan demasiado tiempo a solas, ocasionando no solo ladridos excesivos, también destrozos o suciedad en los hogares.
Si crees que los ladridos de tu perro podrían ser consecuencia de una situación externa que está afectando su conducta, podrías pedir la asesoría de tu veterinario y suministrarle sustancias como Calmiforz o Pleniforz.
Calmiforz ofrece bocados palatabilidad que pueden ayudarte, de un modo sencillo y saludable, a calmar la ansiedad o el estrés en tu mascota, relajándose sin sedarlo. Pleniforz por su parte es ideal como soporte a la salud mental de tu perro, además de fortalecer gracias a sus deliciosos bocados, su sistema inmune.
Cuando una mascota decide ladrar a personas o a otros perros con insistencia, podría estarlo haciendo por dos razones básicas: defensa de su territorio o problemas de socialización.
Es cierto que los canes son animales sociables, pero si no han sido debidamente educados desde cachorros a interactuar de un modo amigable con otros animales o personas, es seguro que en la adultez se mostrará agresivo u hostil.
Si tus perros comparten con otros semejantes y uno de ellos ladra de forma descontrolada, es muy probable que enseñe a sus compañeros esta conducta, con lo cual tendrás en casa una verdadera pandilla de perros ruidosos. Corregir esta conducta es bastante complicado, pero no imposible y te enseñaremos cómo.
Lo primero que debes saber es que los ladridos excesivos de tu perro no podrán calmarse con gritos, así como con otros castigos severos. Para poder calmar a un perro que ladra mucho, es importante promover en ellos la tranquilidad, el afecto y la paz. Calmiforz es una golosina ideal para conseguir este propósito.
Si tu mascota ladra por estrés, hacer una buena cantidad de ejercicio al día lo ayudará muchísimo. Estos juegos y actividades lo harán liberar energía, provocando en él satisfacción, cansancio y por lo tanto, quietud.
Cuando tu perro ladra a otros durante su paseo, lo mejor que puedes hacer es ignorar su conducta sin tensar la correa, porque algunas mascotas reaccionan mal a ese tipo de represiones. Intenta ofrecer a tu perro otro estímulo placentero cuando se altere, como una golosina o un juguete que adore.
También podrías hablar con especialistas en enología, que te ayudarán a corregir ciertas conductas, a identificar sus causas y a reeducar a tu mascota.
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Referencias bibliográficas:
Mercè García (2017). Consejos para evitar que mi perro ladre. Experto Animal. Recuperado de: https://www.expertoanimal.com/consejos-para-evitar-que-mi-perro-ladre-2504.html
Almudena Alameda (2019). Cómo evitar que tu perro ladre, llore o destroce cosas cuando se queda solo. La Vanguardia. Recuperado de: https://www.lavanguardia.com/vivo/mascotas/20190614/462851619208/como-evitar-perro-ansiedad-separacion-solo-casa.html
Affinity Petcare (S/F). MI PERRO LADRA MUCHO, ¿QUÉ PUEDO HACER? Affinity Petcare, Recuperado de: https://www.affinity-petcare.com/advance/es/perro/mi-perro-ladra-mucho-que-puedo-hacer
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